Ay Ryanair... ¿qué vamos a hacer contigo?

Una vez puede ser noticia, dos casualidad, tres mala suerte pero ¿de verdad la cantidad de noticias negativas sobre Ryanair se deben al puro servicio informativo?

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No es que sea una gran fan de Ryanair (no creo que esa especie exista) pero me parece que algo nos estamos perdiendo. Los ciudadanos nos limitamos a ver/leer las noticias y a creérnoslas sin cuestionarnos qué puede haber detrás de eso. Está claro que la compañía aérea irlandesa hace muchísimas cosas mal.
A cambio de sus precios extremadamente bajos obliga a los pasajeros a hacer grandes sacrificios y a intentar sacarles cuanto más dinero mejor.

Todos hemos sentido el temor por ese ansia que parecen tener las azafatas por que tu maleta sea 1 milímetro más grande que el cacharrito para medir los bolsos de mano. Todos nos hemos visto en necesidad de colocarnos más ropa de la que llevábamos al entrar al aeropuerto para que no nos hicieran facturar nuestro equipaje de mano a un precio nada low cost.  También nos hemos sentido enormes al chocar nuestras rodillas con el asiento de delante cuando no, no es que seamos muy altos si no que el espacio entre un asiento y otro debe ser el mínimo (o incluso menos) permitido.

Pero qué queréis que os diga, ya sé que hacen lo que puedan por sacar el dinero a los pasajeros y por ahorrarse ellos lo máximo posible y reservo mis viajes con conocimiento de causa. Lo de que siempre viajan con el combustible justo no es nuevo en absoluto. Lo que sucede es que desde hace unas semanas hasta ahora parece que no hay vuelo que Ryanair haga bien. No creo que los sucesos que nos cuentan sean falsos. Estoy convencida de que son ciertos, pero creo que muchos fallos de otras compañías aéreas no han sido considerados tan interesantes para el gran público. Todos los que hemos viajado con Ryanair nos hemos (perdonad la expresión) cagado en la compañía aérea alguna vez: cuando hemos aguantado insufribles colas, los springs para coger buen sitio, los interminables viajes sintiéndonos como en un mercadillo...

Si yo tuviera dinero no creo que viajara más con esta compañía (o igual sí, quién sabe). Pero como resulta que es la única que me puedo permitir con mi (ningún) sueldo de estudiante seguiré volando con Ryanair.
Sinceramente, yo nunca he tenido con ellos más problemas que los anteriormente comentados. Curiosamente nunca se me ha retrasado un vuelo suyo ni tampoco he temido por mi seguridad. Supongo que de ahí viene mi escepticismo y mi pensamiento de que claro que habrán tenido vuelos malos pero yo he tenido más problemas con otras compañías habiendo realizado en total más viajes con Ryanair que con todas las otras juntas.

Aquí yo feliz antes de un vuelo Alicante-Santiago de Compostela con mi amiga Carmen (imagen modificada para respetar su anonimato) en 2010.

Señores, que en junio encontré un vuelo de Londres a Málaga por 14 euros. Sinceramente, por ese precio como si tengo que ir con otro pasajero en mis rodillas. Es el precio de querer viajar y no ser rica.

Ahora lo que espero son datos... ¿bajarán increíblemente las reservas con Ryanair tras los últimos acontecimientos? No sé por qué pero me da que no.

Finalizo confesando que lo que me ha motivado a escribir esta entrada han sido los comentarios (vale, tweets) de gente, a la que sé que le encanta viajar y tampoco puede hacerlo si no es con esta compañía, que está asustada porque están convencidos de que en su próximo vuelo con Ryanair el avión se va a caer. No me parece justo que se asuste de esa manera a la gente. Cuando veía noticias salpicadas sobre estos casos también me asustaba, pero como he dicho al comienzo de la entrada... con tantas cosas mal salta mi escepticismo y pienso que puede que no todo sea tan malo como parece. Después de todo ese es mi lema... espero que por hacerle caso no me pase algo malo en ese genial vuelo por 14 euros. Ya os contaré... o no.